El mejor día del 2010

Esto es algo que escribí el 21 de diciembre del 2010, narrando lo que pasó ese mismo día.


Hoy les voy a contar una historia. La historia del mejor día del año(?)

Eran las 9am. Estaba en el 98, a 5 cuadras de bajarme para ir al laburo. No me dieron ganas de ir. Y no fui. Dejé que el 98 marque mi destino, y terminé en plaza once.

Ahí miré alrededor, caminé un poco, y me decidí por tomarme el 68. Hacia el norte sería.

Resumiendo, llamé al laburo para avisar que estaba descompuesto, después me tomé el 60, y terminé en el tigre.

Entrené como un hijo de puta, desde que llegué, hasta las 6-7pm. Saqué fotos de todos los spots que usé.

Cuando volvía, me fui a lola mora, porque me sentía mejor que si hubiera descansado 20 hs. Los músculos estaban calientes, y explotaban como nunca.

Por rivadavia me colgué de cada puta estructura de fierros que vi y salté cada linea peatonal. Cuidaba de no joder a nadie, pero me chupaba demasiado un huevo para no hacer algo que quería.

En lola mora le di duro y parejo, un par de horas, hasta las 22.

Resumiendo:
Me recagué quemando, tiré prácticamente todo lo que se, y hasta apareció una especie de reverse con patada que ya veré si se puede sacar algo(?)
Lo mejor es que aunque estaba algo adolorido, no me sentía cansado. Al contrario, los saltos eran re zarpados, y con muchísima seguridad.

Comparto esto con ustedes porque fue algo inesperado, y altamente gratificante. Entrenar no es solo tener más fuerza, o saltar más alto. Entrenar es liberarse de todo, y dejarse llevar, soltar la imaginación, hacer mierda el miedo, y sentirse libre.

Espero que alguna vez les pase a ustedes, o si ya les pasó, me alegro que así sea.

HOY puedo decir que entrené.

Epic day.

Conclusión

Vale la pena cambiar tiempo por guita y "experiencia laboral"?

Eso me preguntaba hace un par de meses atrás. Parece que fué hace mucho más. Lo bueno es que hoy puedo responderlo:

No, no vale la pena ni en pedo.

No tiene sentido hacer algo que no te gusta, perder en eso 12hs al día, e intentar vivir en las otras 12, solo para tener "experiencia laboral", y guita, que si no te hace falta, te chupa un huevo tenerla.

En estos dos meses conocí lo que es el estress, y la verdad que no me gustó nada. Sentir que pierdo el control de mi mismo por cualquier pelotudes es una reverenda cagada. Entrenar ayudó muchísimo. Amo el parkour más que nunca.

Pero lo bueno es que ya terminó. Hace como un mes que avisé de mi renuncia, pero me pidieron que espere hasta que encuentren un reemplazo. Esperé hasta el miércoles pasado, y avisé que me iba, ya era insoportable.

Ahora toca ver qué hago de mi vida. Tengo pensado hacer el curso de guardavidas de la cruz roja, algo que quiero desde que aprendí a nadar.

Y ahora con más ganas que nunca, entrenar. Entrenar, entrenar, y entrenar. Hasta que sienta que me puedo despegar del mundo.